Gaspar, Melchor y Baltasar, стр. 44

POST-SCRIPTUM

1. Nacido, pues, Jesus en Belen de Juda en los dias del rey Herodes, llegaron del Oriente a Jerusalen unos magos.

2. Diciendo: «?Donde esta el rey de los judios que acaba de nacer? Porque hemos visto su estrella al oriente y venimos a adorarle».

3. Al oir esto el rey Herodes se turbo, y con el toda Jerusalen.

4. Y reuniendo a todos los principes de los sacerdotes y a los escribas del pueblo, les pregunto donde habia de nacer el Mesias.

5. Ellos contestaron; En Belen de Juda, pues asi esta escrito por el profeta.

6. «Y tu, Belen, tierra de Juda, no eres ciertamente la mas pequena entre los principes de Juda, porque de ti saldra un jefe que apacentara a mi pueblo Israel.»

7. Entonces Herodes, llamando en secreto a los magos, les interrogo cuidadosamente sobre el tiempo de la aparicion de la estrella.

8. Y enviandolos a Belen, les dijo: «Id a informaros sobre ese nino, y cuando le halleis comunicadmelo, para que vaya tambien yo a adorarle».

9. Despues de oir al rey se fueron, y la estrella que habian visto en Oriente les precedia, hasta que, llegada encima del lugar en que estaba el nino, se detuvo.

10. Al ver la estrella sintieron grandisimo gozo.

11. Y entrados en la casa, vieron al nino con Maria, su madre, y de hinojos le adoraron, y abriendo sus alforjas le ofrecieron dones, oro, incienso y mirra.

12. Advertidos en suenos de no volver a Herodes, se tornaron a su tierra por otro camino.

13. Partido que hubieron, el angel del Senor se aparecio en suenos a Jose y le dijo: «Levantate, toma al nino y a su madre, y huye a Egipto, y estate alli hasta que yo te avise, porque Herodes buscara al nino para quitarle la vida».

14. Levantandose de noche, tomo al nino y a la madre, y partio para Egipto.

15. Permaneciendo alli hasta la muerte de Herodes, a fin de que se cumpliera lo que habia pronunciado el Senor por su profeta, diciendo: «De Egipto llame a mi hijo».

16. Entonces Herodes, viendose burlado por los magos, se irrito sobremanera y mando matar a todos los ninos que habian en Belen y en sus terminos de dos anos para abajo, segun el tiempo que con diligencia habia inquirido de los magos.

(San Mateo, capitulo 2)

Estos pasajes del Evangelio segun San Mateo constituyen la unica mencion que los textos sagrados hacen de los reyes magos. Los evangelios segun Marcos, Lucas y Juan no hablan de ellos. Mateo no dice cuantos eran. La cifra tres suele deducirse de los tres regalos que se mencionan: el oro, el incienso y la mirra. Todo lo demas sale de los textos apocrifos y de la leyenda, incluyendo los nombres de Gaspar, Melchor y Baltasar.

El autor tenia, pues, plena libertad para inventar, recurriendo al fondo de su educacion cristiana y a la magnifica iconografia inspirada por la adoracion de los magos, el destino y la personalidad de sus heroes.

Muy distinto es el caso del rey Herodes el Grande, personaje historico sobre el que poseemos mucha informacion, principalmente gracias al historiador judio Flavio Josefo (37-100 a.C.). El capitulo que trata de Herodes se inspira sobre todo en el, pero tambien se han utilizado otras fuentes, en especial los estudios de Jacob S. Minkin y Gerhard Prause.

La leyenda de un cuarto rey mago, que procedia de tierras mucho mas alejadas que las de los otros, que llego tarde a la cita de Belen y que anduvo errante hasta el Viernes Santo, se ha contado varias veces, en especial por el pastor norteamericano Henry L. Van Dyke (1852-1933) y por el aleman Edzard Schaper (nacido en 1908), quien se inspiro en una leyenda ortodoxa rusa.